Todo el mundo ha tenido alguna vez la sensación de que alguien le está observando, aunque estés en un lugar solitario sin nadie alrededor. El motivo puede ser puramente psicológico o puede que haya algo más. En este caso, toda esta gente percibió lo que se llaman pareidolias, es decir, cuando un objeto te recuerda a otro diferente, a un animal o una persona. Piensa aquí en las nubes con formas caprichosas que te recuerdan a un oso esponjoso o la cara de una persona.
La gente que ha visto caras graciosas o incluso espeluznantes allá donde solo había objetos inanimados tuvieron la oportunidad de compartirlo con todo el mundo, a cuál más graciosa: