marcianos
Hay cosas que se prestan y cosas que no. Normalmente, nunca dejarías a alguien un cepillo de dientes ¿cierto? Pues hay otra serie de cosas que deberías guardarte para ti igualmente.
1 Lápiz de labios
Las enfermedades como el herpes y similares pueden transmitirse fácilmente a través de una barra de labios. Incluso si la persona que tiene el herpes no se le nota, el vimos todavía puede estar presente en la mucosa y la saliva.
2 Auriculares
La cera de los oídos está ahí como barrera para protegernos del exterior. Aun así, existe una flora bacterias que es propia de cada uno. Si prestas tus auriculares a alguien puedes romper la balance de sus propias bacterias y provocar una infección
3 Rulos y clips para el pelo
Los accesorios para el pelo, en general, pueden contener hongos, piojos y similares. Deberías lavar bien todos estos utensilios y no prestarlos.
4 Desodorantes
Aunque los desodorantes tienen propiedades antibacterianas, todavía pueden contener bacterias procedentes de la piel donde ha estado en contacto.
5 Toallas
Las toallas están diseñadas para absorber la máxima cantidad de líquidos y humedad de tu cuerpo, así que se convierten en un campo de cultivo para hongos y bacterias. Tú mismo no deberías reutilizar tus toallas más de 3 o 4 días seguidos.
6 Cosméticos y accesorios de manicura
Todos los accesorios de manicura y cosmética deberían ser usados por una sola persona, porque absorben pequeñas gotas de sangre que quedan en su superficie. Esto puede derivar en herpes e infecciones de hongos.
7 Accesorios de cuidado para la piel
Cepillos, rodillos para masajes, esponjas y demás pueden absorber pequeños trocitos de piel que contienen bacterias. Por ese motivo deberías limpiarlo bien cada día y cambiarlos cada dos o tres meses.
8 Zapatillas de andar por casa
Las típicas zapatillas de andar por casa acaban afectadas por el sudor. Son un lugar donde crecen hongos, sobre todo si te las pones con los pies húmedos. Lo mejor es cambiarlas cada invierno.
