Australia descubre una forma de salvar los océanos de la contaminación con plástico, ya podemos hacer lo mismo

Reciclar plástico se ha convertido en un problema a nivel mundial. Los niveles de polución derivados de los desechos que acaban en el mar están afectando al ser humano y a miles de especies marinas, sin que nadie, de momento, dé con una solución que lo arregle. Por suerte, hay veces en que la idea más sencilla puede ser la más efectiva.

La ciudad de Kwinana en Austrialia está probando una solución simple y rentable para reducir la descarga de residuos de los sistemas de drenaje.

Lo que han hecho es instalar redes en la salida de las tuberías de drenaje, evitando que los desechos sólidos como plásticos y otros contaminantes salieran de las alcantarillas.

El objetivo es evitar que los residuos sólidos de dimensiones medias que provienen de zonas residenciales y que son transportados por aguas pluviales contaminen la Reserva Henley.

Las redes de drenaje o las llamadas “trampas de basura” se colocaron con el fin de reducir la descarga de residuos de los sistemas de drenaje. Las redes están diseñadas para evitar que los contaminantes y los desechos sólidos, transportados por las aguas pluviales de la red de carreteras locales, fluyan hacia las reservas naturales.

Las trampas de basura se colocaron en las salidas de dos tuberías de drenaje, ubicadas entre áreas residenciales y naturales.

El sistema de filtrado simple comenzó a funcionar hace meses en dos ubicaciones, cerca de áreas residenciales y, desde entonces, ha sido capaz de retener 370 kg de basura, tan solo en esa zona del país.

Las autoridades de Kwinana planean instalar nuevas redes en tres ubicaciones adicionales. Según el alcalde de la ciudad, la primera instalación costó alrededor de 20,000 dólares, un precio irrisorio para la efectividad de la idea.

Los residuos recogidos se transportan a una instalación de clasificación, donde los residuos verdes se reciclan y los no reciclables se separan. Los habitantes de la ciudad se alegran de que las redes hayan demostrado ser un proyecto extremadamente exitoso.

De momento su idea se ha hecho viral. Esperemos que este invento acabe siendo de uso extendido en todos los países, sobre todo en los que más producen y contaminan, y se consiga detener en gran medida la contaminación de los mares.