Con el tiempo suele ocurrir que dejas los estudios, los trabajos cambian, y las amistades se alejan porque hacen sus vidas o crean sus familias. De esta forma se hace cada vez más difícil que coincidan amistades durante un tiempo para recordar viejos momentos y pasar un rato juntas.
Según estos estudios, existe una relación directa entre la amistad y la mortalidad.
El equipo de la Universidad Brigham Young encabezada por la doctora Julianne Holt-Lunstad legó a esta cifra a través de datos de casi 150 estudios que analizan las probabilidades de supervivencia y las redes sociales.
Según se desprende de la investigación, se calcula que tener pocos amigos es tan perjudicial para la supervivencia como fumar 15 cigarrillos al día o ser alcohólico.
Ellos creen que preocuparse por los demás nos hace cuidar mejor de nosotros mismos.
Los psicólogos dicen que un círculo de amigos cercanos y fuertes lazos familiares puede mejorar la salud de una persona más que hacer ejercicio, perder peso o dejar de fumar cigarrillos y alcohol.
Las personas sociables parecen obtener recompensas adicionales de sus relaciones sintiéndose menos estresadas, cuidándose mejor y teniendo estilos de vida menos riesgosos que los que están más aislados, afirman.
Una revisión de los estudios sobre el impacto de las relaciones en la salud encontró que las personas tenían una tasa de supervivencia un 50% mayor si pertenecían a un grupo social más amplio, ya fueran amigos, vecinos, familiares o una mezcla de estos.