Cuando uno piensa en graffitis se imagina pintadas en las calles de algunas ciudades, algunas de ellas son actos vandálicos pero otras han llegado a considerarse obras de arte. El caso de este ruso, Evgeny Ches, parece más bien el segundo, porque fíjate el realismo que consigue tan solo utilizando unos botes de spray. Y mira lo que pasa cuando se los lleva al bosque: Facebook Instagram.com