Cuando un avión cae e impacta contra el suelo, las probabilidades que tienen los pasajeros de sobrevivir son pocas, aunque se han dado casos. Entonces ¿por qué no buscar una manera de salvar todas esas vidas? Este inventor ha desarrollado una idea que bien podrías pensar que debió implantarse hace mucho tiempo: un set de paracaídas gigantes que se abren automáticamente en caso de incidente.
La idea es bastante buena, pero no creo que se implante, no ya por una cuestión técnica, sino económica. El peso de los materiales necesarios suponen un peso extra en el avión. Por lo tanto, el número de pasajeros debe reducirse y los vuelos serían menos rentables. youtube
En primer lugar, la zona de pasajeros se suelta del resto del ensamblaje del avión
Luego un par de paracaídas gigantes se abren automátiamente
El descenso de la cabina de pasajeros se hace de forma suave hasta alcanzar al suelo
Los paracaídas se sitúan en la parte superior del fuselaje
La cabina de pasajeros sería intercambiable y se puede desplazar por el aeropuerto de forma independiente
El sistema también funcionaría en el mar gracias a unos flotadores inflables en la parte inferior