Lo que un padre no haga por su hija … en este caso, este hombre ha reconvertido el dormitorio de su hija en lo que querría cualquier niña de su edad: un increíble bosque que parece salido de un cuento. El padre parece que se dedica al diseño en el mundo del videojuego, así que tiene una buena dosis de la imaginación y creatividad necesaria.
El trabajo en sí ha sido importante, 350 horas a lo largo de un año y medio, pero el coste económico tampoco ha sido pequeño, alrededor de 3.000 euros. Eso sí, en pocos años seguramente la chica lo verá demasiado infantil, querrá cambiarlo por otra cosa y habrá que retirarlo todo…